Jo Hummel
Hampshire, 1982
La obra de Jo Hummel se caracteriza por una superficie pintada y de papel con collage en la que emplea variaciones espontáneas de espacio, color y forma. Aunque sus collages pictóricos tienen un carácter físico y material, el contexto es deliberadamente antropológico ya que se inspira en los hábitos y el comportamiento humanos, con un interés especial en el determinismo y el libre albedrío.
Más sobre el artista
Jo Hummel lleva a cabo experimentos en los que el proceso suele determinar el resultado y proporciona un escenario seguro para la improvisación. En definitiva, se trata de un lugar en el que los procedimientos racionales pueden coexistir con la intuición.
De este modo, explora la naturaleza impredecible de la intuición y la espontaneidad. Su práctica funciona como una simulación de experiencias de toma de decisiones que le permiten captar y utilizar sensaciones como la ansiedad o la serenidad.
Y es a través de estos estados emocionales contradictorios (como la comodidad i satisfacción o ansiedad i repulsión) que Hummel es capaz de aprovechar el estado de incertidumbre humana que se siente en todas partes. Las estructuras sociales en las que nos desenvolvemos guían e interfieren en cómo nos sentimos y, así, en lo que decidimos hacer a diario. La clase social, la religión, el género y la etnia influyen en lo que consideramos agradable o desagradable.
La naturaleza del collage es que a lo largo de su creación la obra está en constante cambio. El artista debe negociar el lienzo reorganizando, eligiendo y ajustando, a menudo durante largos periodos y habiendo explorado cientos, incluso miles de los infinitos resultados posibles. De este modo, el propio proceso creativo es tan importante como el resultado final.
Jo Hummel trabaja en su estudio de la isla de Wight, lugar que la ayuda a hacer de este proceso creativo un momeno de meditación.